La muerte es la única certeza que tenemos en esta vida: es el punto final a años de compartir momentos con personas queridas y una despedida de la existencia terrenal. Dicha despedida está envuelta en una gran tristeza por parte de las personas que quedan atrás; sin embargo, entre tanto sufrimiento hay una bella tradición que sirve para celebrar la vida que se acaba de apagar. Debido a ello, los funerales están siempre decorados con flores, diciendo adiós de la manera más hermosa a quien se ha marchado para siempre.
Envío de flores al tanatorio, una bella tradición
Perder a un ser querido es uno de los momentos más duros a los que se puede llegar a enfrentar cualquier persona y, en aras de que este acontecimiento tenga un rayo de luz, la tradición de enviar flores a tanatorio se alza como una de las formas más hermosas de celebrar la despedida de un allegado. Estas flores crean un ambiente solemne a la par de bello, dejando de manera física todo el cariño que el fallecido merece.
Cuando hacemos este envío necesitamos una eficiencia incontestable en la entrega, puesto que existe poco margen de decisión desde el fallecimiento y la celebración del velatorio y su consecuente funeral. Debido a ello, resulta esencial dar con empresas especializadas en este tipo de trabajos que, además de garantizar la mejor presentación en el arreglo floral que deseamos, se encargan de llevarlos al recinto escogido sin margen de error alguno.
Por suerte, hoy en día podemos encontrar compañías de alto nivel en el sector que operan de manera online. De esta forma, tenemos la opción de navegar por la web de una floristería tanatorio, analizar qué tipo de flores son las más adecuadas para la ocasión, realizar la compra y ellos realizarán todas las gestiones pertinentes para que el velatorio tenga los adornos florales pertinentes.
Además de las personas más cercanas del fallecido, las personas que lo conocieron en vida, pero no pueden acudir presencialmente al funeral encuentran en este servicio la manera de rendir su tributo especial a quien se ha marchado de este mundo. Un gesto de cariño de lo más agradecido por los familiares, encontrando en el amor que se le reservaba en vida al fallecido el regocijo para un día tan complicado.
Los mejores arreglos florales para funerales
Las floristerías especializadas en arreglos para funerales disponen de un amplio catálogo de opciones para que sus clientes escojan con absoluta libertad el formato más apropiado para el fallecido; pudiendo elegir tanto por belleza, como por creencias religiosas. En este orden de ideas, si hay una opción que destaca por encima de las demás esas son las coronas de flores: circunferencias adornadas con todo tipo de flores que resultan verdaderamente hermosas.
El clavel es la flor por excelencia en los arreglos para los velatorios y funerales, dada la solemnidad que profesa esta planta. En las floristerías de mayor reconocimiento saben jugar a la perfección con el color, pudiendo así seleccionar una corona de clavel rojo, rojo y blanco o, por otro lado, blanco con otro tipo de flores en el cabezal. A su vez, cabe hacer mención a aquellas coronas con diferentes flores que convergen en la tonalidad blanca y aquellas que también lo hacen con el color rosa, sirviendo para adornar el espacio del tanatorio con una delicadeza abrumadora.
Ahora bien, es necesario señalar que cuando estamos evaluando este tipo de compra las coronas funerarias no son el único arreglo floral disponible. En este sentido, los centros de flores son también gratos candidatos para este tipo de eventos; al igual que las cruces funerarias, las cuales siguen la línea del catolicismo para celebrar que la muerte no es más que el paso previo a la vida eterna.
Así pues, queda en nuestras manos la elección final de las flores que van a depositar todo nuestro cariño de manera física; hablando por nosotros cuando las palabras no alcanzan. Una despedida que a todos nos llegará en algún momento y, cuando lo haga, las flores representarán todo el amor que hemos sido capaces de transmitir en vida.