Para algunas personas, las criptomonedas representan una revolución financiera de tal magnitud que la confianza en ellas, y en lo que puedan lograr, es plena. Para otras, representan un activo que no merece la pena tocar. Lo cierto es que en medio de ambos grupos se encuentran múltiples beneficios de ahorrar e invertir.
Las criptomonedas representan un nuevo mundo dentro del paradigma financiero y tecnológico mundial. Descentralizadas, escalables, rápidas en su accionar y con una curva de aprendizaje mínima, lo que ha permitido que su adopción sea muy elevada en tiempo y en forma.
Ahorrar en criptomonedas, como pudiera ser teniéndolas en la eToro wallet, o invertir dentro de este mundo -lo que también se puede hacer a través de ese servicio de trading-, pueden ser dos actividades que repercutan mucho en el objetivo de generar ganancias y, por qué no, acercarse aún más al concepto de libertad financiera.
Tasas de interés mayores a muchas instituciones bancarias
Una de las características de muchas criptomonedas populares -y que a la vez son funciones que pueden realizarse desde cualquier monedero compatible- es que estas permiten la opción de freezing y staking, que vendría a ser la terminología en el mundo de las criptomonedas para definir un depósito a plazo fijo y una cuenta de ahorros.
Lo cierto de ambas modalidades de ahorro en las criptomonedas es que, incluso en las stablecoins -monedas cuyo valor está anclado a una moneda fiat o a un metal precioso y por tanto no son tan volátiles-, las tasas de interés anuales superan por 10 o incluso más veces el porcentaje de interés que ofrecen las cuentas más competitivas de cualquier banco. Por esa razón, incluso si no quiere absolutamente ningún riesgo de volatilidad, el ahorro es una excelente decisión financiera.
Sin trámites, sin oficinas
Para comenzar a ahorrar, a invertir o a utilizar criptomonedas para comprar productos y servicios, no se requiere de trámites, de documentación ni de ir a ninguna oficina. Algunos servicios, incluso, le permiten usar una tarjeta de débito asociada a sus cuentas en criptomonedas.
Esta sensación de libertad, de usabilidad tecnológica y hasta de privacidad y confidencialidad -en la mayoría de los casos- es algo que suele citarse como una ventaja, así no esté directamente relacionada con lo financiero.
La volatilidad puede jugar a favor
Si bien requiere práctica, las criptomonedas son por lejos uno de los activos digitales en los que invertir tiene mayor potencial de ganancias. Y es que las criptomonedas, o al menos la gran mayoría, son muy volátiles, y aunque puede ser riesgoso cuando se utiliza mal el concepto, es la razón de que muchas personas puedan aprovechar tendencias alcistas de hasta 400% o 600% en cuestión de días o semanas, algo totalmente impensado para cualquier otra clase de activos bursátiles o financieros en los que invertir.
Cuando la volatilidad juega a favor, las ganancias pueden ser exponenciales. Y teniendo en cuenta que muchas criptomonedas tienen comisiones ínfimas por transacción, y que muchos brokers con criptomonedas ni siquiera cobran por realizar movimientos de compra o venta, las ganancias pueden ser incluso mayores a las que se creería de antemano.
Hasta cierto punto, predecibles
Cuando se conocen a fondo, las criptomonedas pueden tener patrones de comportamiento que las conviertan en predecibles. Por ejemplo, el halving es un proceso automático de reducción de emisión de nuevas criptomonedas que muchos criptoactivos aplican cada cierto tiempo, y que en un 90% de las veces incrementará su precio entre un 10% y un 25% minutos después. Es un comportamiento que puede predecirse y, en ese caso, tomar acción gracias a inversiones inteligentes.
Otras criptomonedas, por estar ancladas a otros activos, son susceptibles a cambios -incluso más drásticos con respecto al valor de anclaje- cuando ocurre algo relacionado con aquel activo. Por ejemplo, criptomonedas como PAX Gold tienen un comportamiento predecible en los mercados, porque su valor cambia de acuerdo a situaciones que afecten o involucren al oro, lo cual puede predecirse.