Enseñar a los niños a ser organizados es una habilidad valiosa que les ayudará a lo largo de toda su vida. La organización no es solo importante en el aula, sino también en casa y en su tiempo libre. Los niños que son organizados tienen más probabilidades de tener éxito académico y pueden reducir el estrés y la ansiedad al tener todo bajo control. Si eres padre o tutor, aquí te ofrecemos algunos consejos para enseñar a tus hijos a ser más organizados.
1. Empieza por el suelo
La organización comienza en la habitación de tu hijo. Empieza por el suelo y asegúrate de que no haya nada en su camino. Invita a tu hijo a que te ayude a retirar cualquier objeto del suelo y a ponerlo en su sitio. Es importante que el suelo esté libre de obstáculos para que tu hijo pueda caminar sin tropiezos. Aprovecha esta actividad para enseñarle a tu hijo la importancia de mantener un espacio ordenado y limpio.
2. Establece rutinas
Crear una rutina diaria puede ayudar a los niños a organizarse. Cuando se trata de la hora de acostarse, por ejemplo, establece una rutina para el baño, el cepillado de dientes y la lectura de un libro antes de dormir. Esto hace que tu hijo se acostumbre al hábito y sabrá lo que se espera de él. Lo mismo ocurre con otras tareas, como hacer los deberes o jugar con los amigos. Una rutina organizada hará que tu hijo sea más consciente de su tiempo y le permitirá planificar mejor su día.
3. Dale responsabilidad
A medida que tu hijo crece, puedes empezar a darle más responsabilidades. Asegúrate de que tiene suficiente espacio en su habitación para guardar su ropa y juguetes. Enséñale a doblar la ropa y a guardarla en su lugar. Haz que planifique su día y su semana, pregúntale qué quiere hacer y enséñale cómo hacer una lista de tareas. No importa cuán pequeña sea su responsabilidad, permitir que el niño asuma algunas responsabilidades le ayudará a ser más organizado.
4. Celebra los éxitos
Cuando tu hijo logra mantener su habitación ordenada o cumple con una tarea importante, asegúrate de darle un reconocimiento positivo. Esto podría ser una nota escrita a mano, una cena especial o simplemente un abrazo. Los niños necesitan refuerzo positivo para motivarlos y hacer que sigan esforzándose. No importa lo grande o pequeño que sea el éxito, asegúrate de celebrarlo.
5. Sé un buen ejemplo
Los niños aprenden más de lo que ven que de lo que se les dice. Si deseas enseñarles a ser organizados, deberás ser un buen ejemplo. Esto significa mantener tu propio espacio de trabajo o hogar organizado y limpio, planificar y seguir una rutina diaria y ser responsable de tus propias tareas. Si los niños te ven haciendo todo esto, es más probable que los imiten.
Ser organizado es una habilidad importante para los niños, y como padre o tutor, puedes ayudarles a desarrollar esta habilidad. Empieza por el suelo y asegúrate de que la habitación de tu hijo esté libre de obstáculos. Establece rutinas y da a tu hijo responsabilidades que lo obliguen a ser organizado. Recompensa los éxitos y sé un buen ejemplo para tus hijos. Si sigues estos consejos, podrás enseñar a tus hijos a ser organizados y apoyar su éxito académico y personal.