Hacer ejercicio aeróbico es una excelente manera de mejorar nuestra salud. El ejercicio aeróbico es cualquier actividad que aumente nuestra frecuencia cardíaca y que la mantenga elevada por un período prolongado de tiempo. Hacer ejercicio aeróbico con regularidad puede ayudarnos a perder peso, mejorar nuestra resistencia y fuerza muscular, reducir el riesgo de enfermedades crónicas como la diabetes y la hipertensión y mejorar nuestra salud mental. En este artículo, hablaremos sobre cómo hacer ejercicio aeróbico de forma efectiva.
Escoger una actividad que te guste
Es importante encontrar una actividad que te guste, o de lo contrario, es menos probable que la hagas de manera consistente. Algunas actividades que pueden ser consideradas ejercicio aeróbico incluyen caminar, correr, andar en bicicleta, nadar, bailar, o practicar deportes como el baloncesto o el tenis. Si ya haces algún deporte, utiliza ese deporte como tu actividad aeróbica.
Establecer una meta
Una vez que hayas elegido una actividad que te gusta, es importante establecer una meta. Determina cuánto tiempo quieres dedicar a hacer ejercicio aeróbico cada día, ya sea 30 minutos o una hora. Asegúrate de tener un objetivo específico para trabajar y no simplemente hacer ejercicio sin un propósito.
Hacer ejercicio regularmente
Para obtener los beneficios de hacer ejercicio aeróbico, debe ser parte de tu rutina diaria. Trata de hacer ejercicio al menos tres o cuatro veces a la semana. Si te encuentras ocupado/a, intenta encontrar un momento en tu día para hacer ejercicio, como por ejemplo, salir a caminar durante la pausa del almuerzo, o salir en bicicleta después del trabajo, o incluso despertarte temprano para hacer ejercicio antes de comenzar tu día.
Aumentar la intensidad gradualmente
Comenzar un nuevo programa de ejercicio aeróbico puede ser desafiante al principio. Asegúrate de aumentar la intensidad gradualmente. Si te estás iniciando en una nueva actividad, comienza poco a poco y aumenta la duración o la intensidad a medida que te sientas más cómodo/a. No intentes hacer demasiado rápido ya que eso aumentará el riesgo de lesiones. Recuerda hacer esto de forma gradual.
Variar el ejercicio
Siempre es bueno variar tu rutina de ejercicio para evitar el aburrimiento y para ejercitar diferentes músculos. Si te gusta caminar, intenta caminar en diferentes rutas o agregar algunas elevaciones en tu camino. Si te gusta nadar, intenta diferentes estilos para ejercitar diferentes músculos.
Escuchar a tu cuerpo
Es importante escuchar a tu cuerpo cuando haces ejercicio. Si te sientes demasiado fatigado/a o con mucho dolor, es posible que necesites disminuir la actividad o interrumpir el ejercicio por un día. Es importante no sobreexigirte y permitirle tiempo a tu cuerpo para recuperarse.
Añadir intensidad a tu rutina diaria
Si te has acostumbrado a tu rutina diaria de ejercicio aeróbico, es posible que necesites agregar más intensidad para lograr mejores resultados. Puedes probar intervalos de entrenamiento de alta intensidad (HIIT, por sus siglas en inglés) o agregar pesas a tu rutina para aumentar la fuerza muscular.
Sigue los consejos mencionados anteriormente para hacer ejercicio de manera efectiva y para obtener los mejores resultados. Recuerda escuchar a tu cuerpo y no excederte. ¡Mantén una actitud positiva y disfruta tu actividad aeróbica para mejorar tu salud física y mental!