Muchas personas experimentan la sensación denominada “parálisis del sueño” de no poder despertar mientras están durmiendo y soñando. Esta experiencia puede ser aterradora y dejar a la persona sintiéndose confundida e incapaz de entender lo que está sucediendo. A continuación, hablaremos un poco de las razones detrás de esta sensación y de cómo se puede manejar.
¿Qué es la parálisis del sueño?
Se refiere a la sensación de estar atrapado en un sueño. Durante la parálisis del sueño, la persona está consciente de su entorno, pero incapaz de mover su cuerpo o hablar. Esta sensación puede durar desde unos pocos segundos hasta varios minutos, y puede ser acompañada por alucinaciones visuales y auditivas. A menudo, las personas experimentan parálisis del sueño al quedarse dormidas o al despertarse.
Esta sensación es causada por una interrupción en el ciclo normal del sueño. Durante el sueño, el cuerpo pasa por varias etapas diferentes, incluyendo el sueño ligero, el sueño profundo y el sueño REM (movimiento rápido de los ojos). Durante el sueño REM, el cerebro es muy activo, pero los músculos del cuerpo están paralizados para evitar que la persona actúe con sus sueños.
Cuando la parálisis del sueño ocurre, el cuerpo se queda atrapado en este estado de parálisis, incluso después de que la persona se haya despertado. La causa exacta de la parálisis del sueño no está clara, pero se cree que puede estar relacionada con el estrés, la ansiedad, la falta de sueño, el jet lag y otros trastornos del sueño, como la apnea del sueño.
¿Se puede prevenir?
Hay varias cosas que se pueden hacer para prevenir o manejar la parálisis del sueño. Una de las cosas más importantes es asegurarse de que se está durmiendo lo suficiente. La falta de sueño puede hacer que el cuerpo sea más propenso a la parálisis del sueño, por lo que es importante dormir de siete a ocho horas cada noche.
Además, es importante reducir el estrés y la ansiedad. La parálisis del sueño a menudo ocurre cuando el cuerpo está en un estado de estrés o ansiedad, por lo que es importante encontrar formas de relajarse y liberar el estrés. Esto puede incluir la meditación, el yoga o simplemente tomarse un descanso durante el día.
También es importante evitar la cafeína y otros estimulantes antes de acostarse. La cafeína puede hacer que el cuerpo sea más propenso a la parálisis del sueño, por lo que es importante limitar el consumo de café, té y refrescos con cafeína antes de acostarse.
Si la parálisis del sueño ocurre con frecuencia, puede ser útil hablar con un médico o un especialista en trastornos del sueño. Ellos pueden recomendar tratamientos como la terapia cognitivo-conductual o la medicación para ayudar a prevenir o manejar esta sensación.