Mayormente nos encanta comer frutas naturales. Y si tenemos la dicha de poseer un patio o jardín, qué mayor satisfacción que disfrutar de cosechar y consumir el fruto de los árboles o plantas que hemos sembrado. Ahora bien, la mejor forma para volver a disfrutar la calidad de una fruta exquisita que hayamos probado, es realizando un injerto. Y aunque existen variedades de técnicas te daremos algunas sugerencias para que paso a paso sepas cómo hacer un injerto.
Se conocen varias formas de realizar un injerto; aún así necesitamos tener cierto conocimiento general para que la técnica elegida nos facilite el éxito. Así nos aseguramos de disfrutar y garantizar la calidad de la fruta en todos sus aspectos. Además, podemos recolectar el producto en un tiempo más reducido que el que tendríamos que esperar si sembráramos una semilla. Detallemos entonces algunas pistas básicas para dominar el arte de realizar un injerto.
¿Qué es un injerto?
Es la unión que se produce cuando se incrusta un segmento de una planta en otra; donde ambas se unen mediante sus tejidos vegetales y coexisten entre sí. La planta que recibe el injerto se llama patrón y el trozo injertado se denomina esqueje, injerto o vástago. El éxito de un injerto depende del contacto adecuado entre el patrón y el esqueje; ya que de esa forma se garantiza que las diferentes células de ambas plantas interactúen, se nutran y renueven.
¿Qué plantas pueden ser injertadas?
Las plantas que mejor garantizan el éxito al ser injertadas son las que forman parte de la misma familia vegetal, es decir, que sean del mismo género o variedad. Sin embargo, en ocasiones los injertos de plantas de distinto género que pueden ser exitosos. Por ejemplo la familia de los cítricos.
Utilidad de los injertos
- Realizar injertos permite aprovechar los patrones de plantas originarias, con grandes características beneficiosas como resistencia a las plagas, adaptación a diferentes características de suelo en unión con injertos muy comerciales por su sabor, aspecto, color, tamaño, y otros.
- Cuando se usan esquejes de plantas plenamente formadas su desarrollo es más rápido, y se obtiene plantas o árboles pequeños que producen fruto a corto plazo. Por el contrario cuando la reproducción se realiza mediante semillas el tiempo de cosecha es mayormente a largo plazo.
- Los injertos sirven para facilitar la reproducción de plantas que no producen semillas o que su reproducción es difícil.
- Los injertos permiten obtener más rápidamente árboles multicolores o multiflorales. También sirven para que los árboles frutales produzcan diversos frutos en sí mismos; es decir, un sólo árbol de frutos de la misma variedad como naranja, limón y mandarina.
Recomendaciones para hacer un injerto
- Debe usarse una herramienta de corte bien afilada; así se obtendrán cortes precisos y la planta o árbol no será maltratada.
- Es vital que al realizar los esquejes el tejido vegetal llamado cambium coincida de forma perfecta tanto en el patrón como en el injerto. Así se garantiza la correcta cicatrización de ambas plantas o árboles, la regeneración y la correcta nutrición para el éxito del injerto.
- Ten a mano rafia o alguna cinta parecida para atar con firmeza la zona donde se realice el injerto hasta que las plantas o árboles cicatricen completamente.
- Eliminar los brotes o retoños que la planta o patrón produzca por debajo del injerto, de no hacerlo el injerto fracasará.
- Escoger acertadamente la época para realizar los injertos; esto dependerá del tipo de injerto a realizar y del clima más frecuente en la zona.
Las anteriores no son las únicas sugerencias pero te ayudarán y animaran a conocer y realizar tu propio injerto y obtener éxito.