Un buen porcentaje de las personas viven su vida en base a los planes que tienen respecto a disfrutar de ella, en lugar de ir a la deriva. Esto comienza a manifestarse claramente desde la adolescencia y cuando toca decidir a qué se va a dedicar el resto de la vida. Aquí, además, suele estar incluida la vida amorosa, aunque ésta sea más complicada al depender también de otra persona.
La unión
Éste es uno de los momentos cruciales en la vida de una pareja. Organizar una boda es una experiencia en sí misma, puesto que se pone gran esfuerzo en un día que resulta un punto de inflexión en la vida de los involucrados. La cantidad de decisiones a tomar es inmensa.
Los detalles para mujeres, hombres y niños, las figuras del pastel, las invitaciones, el libro de firmas, etcétera. La lista de detalles a tener en cuenta es a veces abrumadora, y es entonces cuando contratar a alguien se vuelve una opción.
Las cosas para planear de una boda son casi incontables, así que es normal solicitar un tipo de ayuda para lograrlo a tiempo y en excelencia, con cosasdeboda.com puedes hacerlo. Esto hace que la toma de decisiones sea más sencilla, al ir de la mano de profesionales que tienen experiencia en este tipo de eventos. Como resultado, las bodas terminan hechas a la medida de los novios, únicas y originales…lastimosamente, esto no siempre perdura.
La separación
A veces, las cosas no funcionan como se tenían planeadas, y la pareja termina por separarse. En algunos casos, incluso, llegar a un acuerdo para la ruptura requiere de la intervención de un tercero.
El Derecho de familia es una de las áreas de estudio de los especialistas en divorcios, por lo que tienen la capacidad de mediar entre la pareja durante la separación. Su objetivo es que sus clientes salgan los más beneficiados que puedan en términos legales.
Sus servicios comienzan con las resoluciones de la ruptura matrimonial y continúan con la separación de bienes. Es normal que los abogados insten al divorcio por mutuo acuerdo, puesto que es el más ventajoso para ambas partes, pero también hay otras opciones a las que recurrir. Además, en ocasiones una separación resulta suficiente.
La idea es hacerle saber a cada cliente sobre todas las opciones disponibles para que éste tenga la capacidad de elegir qué es lo que se acomoda mejor a sus necesidades. Los abogados en Bilbao se encargan de todos los procesos legales para que la elección sea llevada a la realidad de la forma más fiel posible. Esto se hace, tanto si se resuelve llevar a cabo un divorcio o una ruptura, como también del incumplimiento de convenios establecidos previamente entre ambas partes.
Los clientes suelen tener derecho a una consulta gratuita antes de pedir un presupuesto, en la que exponen el panorama general y las circunstancias en detalle, y se plantean las posibles soluciones. A continuación, los bufetes ofrecen un presupuesto basado en esta consulta previa. Esta primera consulta cobra mucha relevancia porque aquí son expuestas alternativas que quizás el cliente no había tenido en cuenta por la desinformación.
¿Qué pasa con los hijos?
A nivel judicial y personal, asignar la guarda y custodia de los niños menores de edad es un tema delicado. Aunque los padres ya no sean pareja, tienen que seguir cumpliendo con sus obligaciones parentales.
La custodia puede ser de dos tipos: la monoparental y la compartida. En la primera, un padre tiene en su compañía al menor, mientras que el otro progenitor tiene un horario de visitas que se reduce a fines de semana intercalados y la mitad de las vacaciones.
Sin embargo, los especialistas en custodia compartida han detectado un aumento de la custodia compartida cuando ocurre una separación o divorcio, lo que implica que el menor pasa la mitad del tiempo con cada uno de sus padres. Incluso así, la más común en la actualidad es la monoparental.
A pesar de que legalmente en España no hay motivos por los cuales los hijos deban quedarse con la madre en caso de la custodia monoparental, lo más común es darle la guarda y custodia exclusiva a ellas, al menos según las estadísticas actuales.
