El director de Square Enix Yosuke Matsuda explicó en una entrevista que considera que las compañías desarrolladoras de videojuegos japonesas no deberían tratar de imitar el estilo occidental de los videojuegos, a pesar de estar en un mercado evidentemente global.
“Si no reconoces que el mercado de los videojuegos está globalizado, no estas en el negocio” explicó Matsuda, quien agregó que el mercado interno de Japón solía ser mucho más grande, pero actualmente está por detrás de China y Estados Unidos.
Las casas japonesas no deben imitar los juegos accidentales
Matsuda está convencido de que los desarrolladores japoneses cometen un error al tratar de imitar o copiar los juegos occidentales, pues de esta manera están afectando sus propios productos.
El ejecutivo explicó que los jugadores de todo el mundo saben que los efectos visuales, el diseño de los monstruos y de audio siguen siendo japoneses y esto es lo que hace que sus productos sean geniales y reconocidos a nivel mundial.
Es por esto por lo que Square Enix ha aplicado una política al momento de desarrollar sus títulos: cuando van a crear juegos dirigidos a la audiencia occidental, les encargan la misión a los estudios occidentales, mientras que sus estudios japoneses desarrollan los juegos que comúnmente se consideran de estilo japonés entre lo que destacan los JRPG.
La compañía japonesa ha sabido distinguir entre sus estudios occidentales y japoneses siendo cada uno de ellos los encargados de desarrollar diferentes tipos de videojuegos. Todo esto como resultado de la experiencia que tuvo la compañía durante la era del PlayStation 3 y Xbox 360 en el cual trató de redefinir su identidad.
Square Enix es propietaria de desarrolladores importantes como Deck Nine, Eidos Montreal y Crystal Dynamics. También fue propietaria de la franquicia Hitman y de IO Interactive, pero dejó que el estudio se separara y retuviera los derechos de propiedad intelectual sobre la serie.
La Matsuda apuesta por la blockchain
El director de Square Enix también considera que la empresa debe explorar en los juegos “play to earn” (jugar para ganar) y apostar en la blockchain. Considera que sólo centrarse en los juegos tradicionales no sería suficiente para que la empresa siga avanzando. En su visión pronostica títulos en los que los usuarios creen contenidos y sean recompensados por su trabajo, característicos de los “play to earn”.