Para que la vida en el hogar sea más cómoda y placentera, en ocasiones, hay que recurrir a determinados profesionales y contratar sus servicios o comprar diversos productos o artículos que protegen las pertenencias de la casa y que hacen que sea estético y confortable. Los arquitectos para reformas, los protectores para las patas de las sillas y sillones y restaurar las queridas y tradicionales alfombras familiares son ejemplos de esto. Hay que ver todo en detalle:
Ventajas de contratar arquitectos para las reformas
Cuando se quiere modernizar, ampliar espacios o, simplemente, redistribuir las estancias del hogar, nada mejor que buscar a un arquitecto para reformar tu vivienda. Estos profesionales se formaron académicamente para aprovechar los metros cuadrados disponibles, el presupuesto y usar los mejores materiales modernos disponibles en el mercado para cada habitación. Estos son los beneficios que ofrecen:
- Profesionalismo: esto es lo más importante. Son profesionales expertos que pueden concretar las ideas de sus clientes y aportar mucho sobre los bosquejos iniciales para dar vida a cada proyecto.
- Materiales innovadores: casi siempre se quiere copiar una idea de una revista o web para la propia casa, pero el presupuesto no da para determinados materiales o estos se deben modificar por el clima o ahorro de energía. Los arquitectos saben cómo sustituir para lograr un acabado similar al que el cliente desea.
- Uso ideal de los espacios: los arquitectos no aportan solo estética y los detalles que sus clientes desean, sino que saben sacar provecho funcional a cada centímetro de la casa. Son capaces de optimizar esquinas, bajos de las escaleras, armarios y mucho más.
- Presupuestos: estos profesionales saben usar el dinero disponible en el presupuesto de un proyecto sin excederse y con el mejor acabado y potencialidad de cada ambiente.
¿Por qué usar protectores de patas para las sillas?
Cuando se hace la inversión de comprar muebles y una casa o piso, posiblemente, se esté comprometiendo una cantidad de dinero considerable que ha costado sudor ganar. En consecuencia, se quiere resguardar los suelos y las sillas y sillones.
Para eso está un pequeño artículo como el protector patas sillas de materiales resistentes que cuidan el parquet de madera, los suelos flotantes y el granito (entre otros) de rasguños y arañazos.
Además, estos protectores de goma muy resistentes también protegen las patas de las sillas y sillones para que no sufran el desgaste propio de los años y el uso constante.
Aunque parezca una nimiedad, proteger las patas de las sillas y el suelo no es tontería. Un encerado o los suelos flotantes puede sufrir daños horrendos si las sillas (sobre todo si son metálicas) carecen de esta cubierta protectora.
Por otra parte, son pequeños artilugios tan baratos que no usarlos es una tontería, ya que si el suelo se raya o daña, tener que sustituir parte del suelo flotante o llamar a un acuchillador de parquet puede salir muy costoso.
Restaurar las alfombras
Para muchas familias restaurar alfombras es mucho más que una labor de mantenimiento en el hogar. En ocasiones estas son más que piezas de decoración y más bien son obras de arte o un legado que ha pasado de generación en generación.
Para restaurar alfombras que se han deshilachado, manchado o que han sufrido el impacto de polillas u otros insectos, hay empresas con verdaderos artistas artesanos que reparan la trama hilo a hilo y de forma manual para recuperar el esplendor de la pieza.
Estos profesionales estudian los textiles y eligen las fibras para que sean idénticas a las originales y recuperan cualquier alfombra. Además, dentro de sus múltiples servicios ofrecen también limpieza profunda con técnicas de secado únicas para evitar malos olores.
Asimismo, recogen la pieza en el domicilio, las arreglan, lavan, secan, le ponen una cubierta protectora anti insectos y la entregan sin cobro adicional. Es un maravilloso y oportuno servicio.