Trabajar en casa supone un reto importante para el que hay que prepararse adecuadamente, ya que el trabajo ha de ser efectivo y agradable a partes iguales. Hoy os damos algunos consejos para preparar la zona de trabajo y organizar el día laboral.

Ventajas del teletrabajo
Últimamente el trabajo se ha vuelto más frecuente. En una época en la que todo está informatizado, hay numerosas funciones que se pueden realizar tranquilamente en casa. Además, todo apunta a que trabajar en casa suele ser más efectivo. Por eso cada vez más empresas permiten a sus empleados trabajar en casa.
Para las empresas, implica una reducción de costes de alquiler y equipamiento de la oficina. Por otro lado, el empleado es más independiente, lo que suele incrementar su creatividad. Otra gran ventaja es el dinero y el tiempo que te ahorras al no tener que ir a la oficina.
Para mucha gente que decide trabajar desde casa, otro tema importante es que tienen paz y tranquilidad. Nadie les molesta y pueden centrarse por completo en sus tareas. Además, las personas que teletrabajan no caen tanto en la rutina.
Delimita tu zona de trabajo
Si decides trabajar en casa, debes delimitar una zona en la que vayas a cumplir con tus obligaciones laborales. Lo más recomendable es tener una habitación separada, pero también puedes crear una zona de trabajo en el salón. En el dormitorio no lo recomendamos tanto.
La zona de trabajo debe incluir un escritorio, una silla giratoria cómoda y un estante o estanterías para los documentos y los libros. Así evitarás el desorden y encontrarás todo lo que necesites en un santiamén. Acuérdate también de que la iluminación sea adecuada. Lo ideal es tener el escritorio junto a la ventana para que entre luz natural durante el día.
A la hora de diseñar tu zona de trabajo, ten en cuenta las indicaciones de las normativas de seguridad e higiene laboral.
Lógicamente, organizar un rincón de trabajo conlleva ciertos costes. Si te faltan fondos y te urge comprar material, merece la pena pedir créditos rápidos online. Si buscas bien, puedes encontrar créditos con buenas condiciones y sin trámites innecesarios.
En casa tendrás que explicar que esa zona es tu lugar de trabajo y que cuando estés ahí, no te puede molestar nadie. Ocupar la oficina doméstica para otros objetivos (p. ej. para que el niño haga sus deberes) debería estar descartado.
Cosas que tener en cuenta
Trabajar en casa también presenta sus riesgos. El principal es no saber organizar bien el tiempo de trabajo. Por lo tanto, fija desde el principio unos horarios claros para trabajar y no te salgas de ellos. No hagas tareas domésticas en tus horas de trabajo. La colada y los platos pueden esperar.
La gente que teletrabaja suele olvidarse de hacer pausas, pero son fundamentales tanto para tu salud como para la calidad del trabajo. Así pues, determina cuándo hacer pausas y aprovéchalas.
No trabajes en albornoz o pijama, ya que suelen bajar la motivación. Si te vistes como si fueras a salir de casa, estarás más activo y cumplirás mejor con tus obligaciones.
Otro error habitual de los trabajadores a distancia es hacer horas extra. Por supuesto, no pasa nada si de vez en cuando tienes que echar alguna horita de más porque haya algo urgente. Sin embargo, si trabajas cada día de sol a sol, cambia ese hábito de inmediato y acaba tu trabajo a la hora planeada.