Tener una bicicleta es tener libertad. Desde que se es pequeño se desea este regalo de Papá Noel o de Reyes. Es la mejor manera de hacer ejercicios, de disfrutar del aire libre y de un paseo, a la vez. También es un medio de transporte ecológico que contribuye a cuidar el planeta. Planear una salida con amigos a la playa o la montaña en bici es una de las más divertidas aventuras.
Sin embargo, a la hora de comprar una bicicleta hay que tener en cuenta diversos factores que se enumeran a continuación.
La tienda
Cuando se quiere comprar una lavadora se va a una tienda de electrodomésticos. Si se desea pan hay que ir a la panadería. Si se quiere una caldera se debe buscar una empresa de sistemas de climatización. Para elegir una bici hay que recurrir a expertos como una tienda de bicicletas en Madrid que se especialice en estos vehículos.
En estos establecimientos hay todo tipo de bicicletas para todos los usos: de paseo, de montaña, escaladoras, de gran fondo, de doble suspensión, de carbono, aluminio para carreteras, de carreras, para grandes y chicos, etc.
Además, ofrecen todo el equipamiento como cascos, guantes, zapatos, ropa, coderas, rodilleras, chalecos, gorras, gafas de sol polarizadas y mucho más. Esto hará más seguro el usar la bicicleta y también más cómodo.
Igualmente proporcionan asesoramiento sobre el tipo y tamaño de bicicleta que se requiera de acuerdo a las necesidades. Toman en cuenta, también, el presupuesto y tienen bicicletas desde los 700 a los 3 mil euros o más.
Se trata de un vehículo
La gente no suele tratar la bicicleta como un vehículo, a pesar de que la compra de una incluye una serie de obligaciones con respecto a otros actores de la movilidad.
Esto también supone una importante elección económica, porque la bici no es un juguete o un artilugio barato.
Es un vehículo, por lo que se necesita que funcione bien, lo que supone una inversión con ventajas y riesgos si no se hace mantenimiento como se le hace a un coche.
Por eso, hay que acudir a tiendas de bicicletas especializadas que ofrecen asesoramiento a la hora de la compra sobre las partes que hay que engrasar, las llaves o herramientas que se deben comprar y el servicio técnico o mantenimiento que se le debe hacer periódicamente.
Cuando se adquiere una bici muy barata, se corre el peligro de malgastar el dinero, ya que las piezas de recambio acaban rompiéndose. Actualizarlas suele ser más caro porque requiere desmontar la pieza dañada y sustituirla por otra de mejor calidad.
Además, los expertos aconsejan que es mejor adquirir una bicicleta con cuadros fabricados con materiales de alta calidad, que destacan por su mayor durabilidad. Entre estos materiales se encuentran el aluminio, el titanio o la fibra de carbono.
El uso real que se le dará
Con frecuencia, cuando se empieza a andar en bicicleta se crea mucho entusiasmo y se piensa que se usará a diario.
Pero, ese entusiasmo acaba decayendo, al igual que puede ocurrir con muchas otras cosas, como ir al gimnasio o hacer dieta.
Es fundamental tener en cuenta el tiempo que se le va a dedicar a la actividad de andar en bicicleta. Si se va a montar en bici los fines de semana o si va a ser una práctica habitual para ir al trabajo, a la universidad o al instituto.
Hay bicicletas que cuestan 150 euros y otras que sobrepasan los 3 mil euros. Las hay de carrera, competencia, paseo y muchos usos más.
Vale la pena tener una bicicleta con componentes de alta calidad y resistencia, pero, si es para un niño que pronto necesitará una más grande porque crecerá o si se utilizará pocas veces al mes, es preferible elegir una más barata.
El tamaño
No es lo mismo una bicicleta para un adolescente de 13 años que para un adulto. El tamaño de la bici que se compre va a estar pautado por la estatura de quien la use.
Lo mejor es asesorarse con los expertos de la tienda para el elegir el tipo de bicicleta más adecuado