La creación de hogares más funcionales y más confortables ha sido objeto de estudio durante las últimas décadas. Está más que demostrado con hechos e investigaciones, que un hogar confortable y funcional influye positivamente en la salud, la productividad, y en los logros personales y colectivos de las familias.
No hace falta ahondar mucho para notar que el hogar es el santuario de las personas y las familias, es el punto de encuentro después de una larga jornada y es el cuartel general de la administración familiar, allí confluye prácticamente toda la vida, y por ello el confort es un concepto muy importante. La climatización y el confort van muy de la mano y escoger el mejor aire acondicionado por conductos puede tener un aporte significativo sobre la calidad de vida de las personas -ahora que es necesario pasar más tiempo en casa-, y de la misma manera ocurre con todos los productos y sistemas de climatización.
Influencia de la climatización en el confort del hogar
El confort es un concepto que abarca desde la sensación de seguridad que se puede tener en casa hasta ‘esas ganas de estar dentro de la misma’, que suelen tener las personas. Un hogar caluroso o muy frío, sin duda, será un hogar en el que no se querrá estar tanto tiempo, y en el que incluso las personas pueden sentirse inseguras -sobre todo si el aire se vuelve pesado o muy seco, dificultando respirar y hasta evidenciándose en los niveles de energía-.
Por eso la climatización es un aspecto clave, ya que entendida como todos los elementos y sistemas que se deben integrar en un hogar para mantener una temperatura adecuada, quizás sea la inversión más notoria en materia de confort doméstico. Y su influencia puede ser tal, que puede afectar a la calidad del sueño, la productividad laboral -algo vital si se trabaja en casa gran parte del tiempo- y a la salud en general.
El aire acondicionado, el producto estrella
Dentro de la climatización el producto estrella es, sin duda, el sistema de aire acondicionado. No importa si se trata de un aire acondicionado económico tipo split o de ventana -ideales para climatizar habitaciones concretas- o si se trata de un complejo sistema de climatización por conductos o de un aire acondicionado centralizado, que con una sola instalación puede ser suficiente para climatizar toda la casa. Se trata del producto más influyente, y por ello, toda búsqueda de confort debe comenzar con la resolución de saber si existe la necesidad de mejorar la climatización del hogar, y luego, cuando eso sea resuelto, pasar a los siguientes aspectos que puedan afectar positivamente al confort.
El confort en casa y la nueva normalidad
Cuando se pasa poco tiempo en casa -a menudo sólo para almorzar o descansar por las noches, producto del ritmo de vida moderno- el confort tiene poca importancia, porque no llega a ser percibido en su totalidad. En cambio, cuando se pasa más tiempo en casa, cuando se puede trabajar desde allí y cuando diversas situaciones obligan a tener que refugiarse en el calor del hogar -como lo que sucede con la nueva normalidad– al confort se le pueden ver los defectos, de manera que aún será más importante hacer los cambios correctivos necesarios.
Bien es cierto que la simple instalación de un aire acondicionado puede mejorar notablemente la calidad de vida de las personas involucradas, así como también el confort de un hogar entero. Pero eso no quiere decir que sea el único aspecto que se deba cuidar, siendo otros importantes, como la seguridad doméstica -un hogar bien climatizado pero inseguro desde la sensación de la familia, no será confortable-, la iluminación adecuada -la intensidad de iluminación tiene efectos muy poderosos sobre la energía, la productividad y hasta la calidad del sueño-, los colores y materiales elegidos para la decoración de los espacios, y así todo un sinfín de elementos que, cuando se combinan, marcan la diferencia y crean hogares, tanto funcionales como confortables.