El aceite de oliva es uno de los productos con denominación de origen y de mayor calidad de España, esto es así porque se trata de uno de los productos estrella en la exportación de alimentos, produciéndose en este país más de la mitad del aceite que llega a todo el mundo, seguido por Italia y Grecia.
El aceite de oliva es un aceite vegetal que se emplea en la elaboración de algunos platos de cocina. Se elabora a partir del fruto del olivo, la aceituna u oliva, tras su maduración, que dura entre seis y ocho meses. La calidad del aceite dependerá del tipo de aceituna empleada para su elaboración y del grado de acidez de la misma. Dependiendo de su uso, es aconsejable comprar aceite de oliva virgen extra, la variedad de mayor calidad, cuyo grado de acidez no supera los 0,8º de ácido oleico libre. Es comúnmente conocido por el acrónimo AOVE.
Sin embargo, el proceso de envasado del aceite también es importante, pues para el disfrute de un buen aceite es necesario que se conserve en las mejores condiciones posibles, desde su producción hasta su consumo.
Veamos algunos aspectos relevantes en torno al envasado de este producto.
Aspectos del envasado del aceite de oliva
El fin último del envasado de productos es mantenerlos en perfectas condiciones hasta su consumo. Antes de envasar el aceite de oliva, se somete a la filtración de impurezas, para evitar humedad y que posteriormente se produzcan depósitos en el envase. La mayoría de las marcas envasan sus aceites en envases PET o de polietileno, que son los más sensibles, a diferencia de los envases de vidrio, que son más caros pero más resistentes.
Los aspectos como la pureza y la excelencia del producto se presentan en algunos envases, en el apartado de información opcional de su etiqueta. Es obligatorio proporcionar información sobre el tipo de aceituna de la que procede el aceite.
Por qué es importante un buen envasado del aceite de oliva
A la hora de comprar aceite de oliva virgen extra, un buen envasado nos ofrecerá un producto de mayor calidad, ya que aunque se recolecta y se produce a partir de la mejor variedad de aceituna, un mal envasado puede echar a perder toda una producción de aceite.
Estos son los siguientes aspectos que un buen envasado necesita para su conservación.
- En el caso del aceite, hay que tener en cuenta dos agentes que afectan negativamente a este producto: la oxidación y la fermentación. Algunos aspectos que afectan a la oxidación son el contacto con el oxígeno del aire y la radiación de la luz, por lo que el material con el que esté elaborado el envase, también es importante.
- En cuanto a la radiación de la luz, debido a los cambios de temperatura, el aceite puede perder estabilidad si se somete a una exposición directa. Por ello, los mejores envases son aquellos que están hechos con cristales opacos u oscuros, o, en su defecto, plásticos en el mismo estado.
- También hay que mantenerlo fuera de grandes fuentes de calor, ya que su temperatura idónea es la temperatura ambiente. Para ambos aspectos, la luz y el calor, lo mejor es almacenar nuestras botellas en un armario de la cocina, donde se encuentren a oscuras y en una temperatura ambiente, que tiende a ser más fría que en el resto de la cocina.
Como se ha mencionado, es importante que el envase esté bien cerrado y una vez abierto, lo conservemos con su tapón, ya que el oxígeno es uno de los principales agentes que afectan al deterioro y la pérdida de cualidades de este producto. Hay que saber que en contacto continuado con el oxígeno, el aceite adquiere un sabor rancio.
Teniendo en cuenta todos estos aspectos, debes evaluar cuál es la mejor marca de este producto y tener en cuenta los aspectos que pueden afectar a su conservación en nuestro hogar.