Cambiar de Afore es un trámite importante para la salud de tus finanzas, ya que estarás eligiendo a la administradora responsable de invertir y hacer crecer el dinero para tu retiro laboral. Por ello, antes de hacerlo, tienes que reflexionar si tus motivos son suficientes para hacer el cambio o si es mejor quedarte en tu Afore actual.
Aquí te damos las 3 razones principales por las cuales podrías considerar tu cambio o traspaso.
3 razones por las te convendría cambiar de Afore
1. Rendimientos más competitivos
Uno de los motivos más importantes por los que puedes estar pensando en cambiarte son los rendimientos que puede generar una administradora, con base en tu año de nacimiento.
Para verificar si tu Afore está ofreciendo bajos rendimientos de acuerdo a tu edad, debes consultar el Indicador de Rendimiento Neto (IRN) de la Consar. Este indicador se actualiza de forma anual y reporta el comportamiento de cada una de las Afore en México.
Sólo deberás seleccionar la SIEFORE a la que perteneces —la reconocerás por tu año de nacimiento— para poder leer esta información.
2. Mejor servicio al cliente
Además de los rendimientos, otro punto clave en tu satisfacción es el servicio que recibes como cliente de la Afore. Lo mejor de todo es que es muy fácil identificar qué Afore es la que ofrece mejor trato a sus clientes, gracias al Medidor de Atributos y Servicios de las Afore (+MAS AFORE).
Este medidor también es realizado por la Consar y su objetivo es evaluar la calidad operativa de las administradoras, tomando en cuenta:
- Cantidad de canales de atención y la calidad del servicio dado.
- La incorporación de trabajadores a la Afore, es decir, los clientes que deciden permanecer en ella.
- La rapidez y efectividad en sus servicios.
- La atención y conclusión de los trámites iniciados por los clientes.
3. Accesibilidad y confianza
Otro factor que puede influir en tu decisión de cambiar de Afore, es la accesibilidad de los servicios, así como la reputación que la administradora tiene con otros clientes que sean conocidos, amigos o familiares tuyos.
Puedes saber si una Afore tiene accesibilidad de servicios revisando las localidades donde tiene sucursales abiertas, si publica y responde activamente en sus redes sociales, si cuenta con una app móvil para que hagas los trámites desde tu celular y si su sitio web y portal de clientes funcionan correctamente.
Qué considerar en el cambio de Afore
Si después de leer estas 3 razones, decides que quieres avanzar con tu cambio de Afore, recuerda tomar en cuenta estos puntos:
- Si la situación económica a nivel nacional es inestable, es decir, que haya inflación o encuentres noticias sobre minusvalías en las Afore, espera un poco antes de iniciar el trámite. Cambiarte en un periodo de volatilidad puede afectar tu dinero.
- Puedes cambiar de administradora sólo una vez al año. Si es tu segunda solicitud de cambio en un año, no te dejarán hacerlo a menos que te vayas a una Afore con mayores rendimientos.
- Recuerda tener tu Expediente Electrónico actualizado. Si no tienes uno, la Afore a la que quieras moverte se encargará del trámite.
- Una vez iniciado el trámite, suele terminar en aprox. 20 días hábiles, así que ten paciencia y espera a que la Afore se comunique contigo para confirmar o negar tu cambio.
También considera la documentación y requisitos para cambiar de Afore:
- Número de Seguridad Social (NSS)
- Identificación oficial vigente y CURP
- Comprobante de domicilio no mayor a 3 meses
- Validación de identidad por biometría
- Expediente Electrónico (si es que ya te habías registrado en una Afore)
Dependiendo de la Afore que hayas elegido, así como de la vigencia o existencia de tu Expediente Electrónico, tendrás la opción de cambiar de Afore en línea o tener que acudir a sucursal a generar tu Expediente o actualizar tus datos.