SEAQUE estará hospedado en la Estación Espacial Internacional por la división de aire Nanoracks Bishop. Las columnas azules y doradas unidas al costado de la división de aire son para cargas útiles externas. La exposición de tecnología se instalará en uno de esos puntos.
El experimento sufragado por la NASA probará dos tecnologías que inciertamente podrían permitir que los monitores cuánticos se comuniquen sin interesar dónde se encuentren.
Nuevas pruebas en el espacio
Un pequeño estudio que se lanzará a la Estación Espacial Internacional a finales de este 2022 podría preparar el medio para una futura red cuántica global. El experimento cuántico de entrelazamiento y recocido espacial (o SEAQUE), la demostración de tecnología es del tamaño de un cartón de leche que experimentará dos tecnologías de comunicación en el duro espacio.
Las computadoras cuánticas prometen manejar más rápido que los monitores convencionales, y los diferentes sensores cuánticos inordenados logran llevar a una nueva razón de la Tierra y el universo al medir cambios microscópicos en la gravedad. Para que los monitores cuánticos o los sensores se comuniquen, solicitarán de una red de comunicaciones dedicada. Un equipo clave de esta red serán los «nodos» espaciales que logran recibir y transmitir datos cuánticos hacia y desde el suelo mediante comunicaciones ópticas en el espacio libre.
Se plantea descubrir la viabilidad de las tecnologías
SEAQUE se plantea mostrar la viabilidad de las tecnologías que lograrían permitir que los nodos en órbita enlacen de forma segura transmisores y emisores cuánticos a grandes distancias. Para hacer eso, estos nodos deberán generar y detectar pares de fotones entrelazados. Casualmente, la transmisión de dichos fotones a monitores cuánticos en tierra podría suministrar la base para la computación cuántica en la nube: los intermedios para intercambiar y procesar registros cuánticos independientemente de dónde se localicen las computadoras.
Una vez acoplado al exterior de la estación espacial, SEAQUE igualmente probará una técnica para auxiliar a los nodos espaciales a «autocurarse» del daño por radiación, un reto continuo de conservar instrumentos delicados en el espacio.
“La exposición de estas dos tecnologías sienta las bases para posteriores redes cuánticas globales que pueden enlazar computadoras cuánticas situadas a cientos o inclusive miles de millas de distancia”, expresó Makan Mohageg, investigador de SEAQUE en el Laboratorio de Propulsión a Chorro del sur de California.
Del mismo modo que la red que pretende facultar, el proyecto es global. La asistencia SEAQUE incluye científicos y alumnos de la Universidad de Illinois Urbana-Champaign, que dirige el proyecto.